+Limpiar con un paño húmedo. Usar solo agua.
+Cuidar que el cuero no se raye, o manche con tinta, evitar superficies abrasivas.
+No sobrecargar el bolso, podría sufrir deformaciones.
+No almacenar en lugares húmedos o con sol directo.
+Cuando el producto no esté en uso, guardarlo en la bolsa protectora de tela, sin poner objetos encima
+Si se derrama cualquier tipo de líquido o sustancia dentro, limpiar con un paño húmedo o con un poco de jabón neutro.
+Secar a la sombra
+Limpiar los herrajes con un paño seco, no utilizar crema para brillar metal.
+En el caso de herrajes de bronce sólido, limpiarlos cada mes con un paño seco, se pueden brillar a mano sin ningún tipo de crema.
“No hay nada más hermoso que tu producto perfecto… Que con el paso del tiempo siga siendo como nuevo” Martin Mood
